miércoles, 30 de septiembre de 2015
HISTORIA DE LOS CABEZUDOS
Infatigables, generación tras generación los gigantes y 
Cabezudos continúan persiguiendo – encorriendo en Aragón – a los 
chavales que, no menos tenaces, les dirigen los mismos insultos y 
picardías que sus tatarabuelos.
Rinde
 homenaje al folklore aragonés. Jotero y nacido en el Rabal, protegido 
por Don Jorge Jordana, entró a trabajar en el sindicato de riegos de la 
Acequia del Rabal, llegando a ser azutero, de ahí su mote.  De ideas 
republicanas, y en alguna ocasión terminando en la cárcel, llamado Pedro
 Nadal (conocido por El Royo del Rabal), se convirtió en el rey de la 
jota. Solía acudir a la Reja, una tienda-taberna, donde montaban grandes
 lifaras, él cantaba y personajes (como Pérez Galdós) o toreros acudían,
 siempre que pasaban por Zaragoza para poder oírle cantar.
Considerado como el más importante cantador de jota en su época 
cultivó las jotas Zaragozanas puras, las Fieras, las Rabaleras, 
 femateras y rondaderas o jotas de ronda.
“Azutero panzón deja de cantar jotas y reparte el zurrón”
 Se
 trata con toda probabilidad del cabezudo mas popular. Se dice 
que retrata al mozo de cuadra que se trajo de Cuba el conde dela Viñaza.
 De todos modos, en Zaragoza, como en otras ciudades, hubo cabezudo 
negro desde mucho tiempo atrás, siempre gozando del favor de la 
concurrencia por su carácter, a la par exótico y jocoso. Viste al modo 
tradicional de los jockeys o jinetes de las carreras de caballos, con la
 tradicional gorra visera. Dice su canción oficial:
Representa
 a un corregidor de la ciudad, predecesor de los actuales concejales. El
 nombre le viene de la excrecencia o verruga que le es propia. Usa 
casaca y sombrero de tres picos, a la moda del siglo XVIII. Según el 
dicho popular:
Parece
 retratar a un tal Melendo, medico de profesión y celebre por su 
sombrero bicornio se le ha llamado el Napoleón. Para algunos rememoraba 
al rey intruso José Bonaparte, lo que le hacia victima de las mas 
crueles burlas. Esto le cantaban:
Es
 un paleto que acude a las fiestas del Pilar en ropa de domingo. Así, ha
 recibido también el apelativo de Baturro. En otro tiempo representó a 
un postillón de las antiguas lineas de diligencias, por lo que no 
extraña que a veces se le llame Cochero. Hay un par de canciones que 
retratan la actividad cotidiana de la pareja de Foranos:
    En
 la actualidad es una baturra, oficialmente emparejada, desde 1916, con 
el Forano. Presumiblemente su origen esta en la desaparecida Teresa 
Panza del grupo creado por Oroz. Con los cambios de gusto su cara se fue
 modificando notablemente: su rustico semblante primigenio evolucionó 
hacia unas formas mas finas y unos rasgos mas delicados, en la medida de
 lo posible. Su canción la trata bastante mal:
Representa
 un diestro del tiempo de Pepe Hillo, Martincho y Josef Cándido, vestido
 a la goyesca. Su incomprensible expresión y su fenomenal bicornio 
hacían de este cabezudo una de las figuras mas logradas de la comparsa 
vieja. La arrogancia de su porte motivó esta graciosa copla:
En
 fecha temprana perdió su verdadera personalidad, la de Sancho Panza 
(que nada tiene que ver con la nueva figura que se sacó en 1947). 
También se le conoce por el Piruli o don Juan Piruli, por su pintoresco 
gorrillo de punta. Sus canciones no tienen textos muy elaborados:
Tres
 circunspectos zaragozanos se disputan el honor de haber sido retratados
 en esta cabeza: don Pedro Alonso Pérez, acaudalado ciudadano; Felix 
Bartolomé Guillén y carabaotes, jurisconsulto nacido en 1818, amigo de 
Felix Oroz; y Tomás Bayod, el único farmacéutico de los tres, 
propietario del establecimiento sito a la entrada de la calle Alfonso. 
Su iracundo gesto, unido a sus furibundas cejas y amenazadoras patillas,
 lo convierten en unos de los cabezudos mas temibles. Tiene dos 
canciones:
Es
 la ultima adquisición de la comparsa. Representa a Pilar Lahuerta, 
cantante del famoso Salón Oasis de Zaragoza. Lleva diadema con plumas, 
como las vedettes del music-hall.
Los integrantes de la comparsa actual son diez,
 que pasamos a presentar. Acompañan a las descripciones las tonadas 
propias de cada personaje, populares unas y propiciadas otras por los 
ediles con el fin de atenuar lo rufo y soez del habla callejera.
EL AZUTERO
“Azutero panzón deja de cantar jotas y reparte el zurrón”
EL MORICO
“Aquí, aquí, Morico el Pilar, se come las sopas y se echa a bailar.”
“Al moro le gusta el vino, al moro le gusta el pan, al moro le gusta todo menos ir a trabajar.”
EL BERRUGÓN
“Al Berrugón le picaron los mosquitos y se compro un sombrero de tres picos.”
EL TUERTO
 “El tuerto, tuerto es. El tuerto, por melon, se cayo  un tozolón”
EL FORANO
“El Forano se ha ensuciado y la Forana lo ha limpiado con un trapo colorao.”
          “La Forana tira la mierda por la ventana. El Forano tira la mierda por el ventano”
LA FORANA
  “Que no se diga, que no se note, que la Forana (Putica) lleva bigote. Un, dos, tres, puta es.”
EL TORERO
“El Torero, como es tan chulo, salta la tapia y se rompe el culo (le dan por el c…).”
EL ROBACULEROS
“Al Piruli de la Habana, Piruli.”
 “Don Juan Piruli de la Habana, Piruli.”
                      “El Robaculeros no sabe correr y por eso da tantos traspies.”
EL BOTICARIO
 “Boticario, canario, patas de alambre, le cayo una teja y no le hizo sangre.”
 “Boticario, canario, garras de alambre, tiene criada que la   mata de hambre”
LA PILARA
Cliente habitual en los comienzos de 
nuestro restaurante. La podíamos ver asiduamente en los cabezudos, 
degustando las tapas y saludando a los clientes.
"La Pilara cuando camina , mueve las plumas como una gallina" 
Y este año... un nuevo cabezudo llamado...


